No
sólo es amor, es sentimiento
No sólo
es el deseo, la pasión ni el amor que nos une, es mas bien la
sensación de plenitud, sentimiento, comprensión, confianza... lo
que nos lleva a convivir cada día desde que nos conocimos.
El
placer que me otorgas, las caricias, los besos, sentir tus manos y tu
cuerpo sobre el mío de una manera íntima, no siempre es suficiente.
A veces tengo que sentir tus labios bebiendo mis lágrimas. Tus manos
apartando mi pelo de la cara cuando me pides que te mire. Tus piernas
enrolladas en las mías cuando estamos en la cama, entre sábanas
deshechas que se caen por los lados. Tu respiración en mi boca
mientras nos movemos al mismo compás del placer y el deseo, esos
gemidos ahogados que tus labios me secuestran sólo para ti.
El
despertarme cada mañana y ver que sigues ahí. Sentir la presión en
mi cuerpo cuando empiezo a abrir los ojos y veo tus brazos rodeándome
y pegándome a ti.
Es mucho
mas que todo eso. Es el sentimiento de saber que te tengo ahí, que
estás conmigo, que me abrazas, me acunas, me proteges por las noches
entre la fría oscuridad. La tranquilidad de saber que combates mi
miedo para que no me aterre y salga huyendo. Que me mimas, me apoyas,
me quieres... que soy tu frágil muñeca que en tus manos no se
rompe.
Me
encuentro sentada en el balcón, donde se empieza a perder los
últimos rayos de luz del día. El aire frío hace ondear mi camisón
y me voy a quedar helada. Entro a nuestra habitación y me meto en la
cama, esperando que vuelvas tarde, como llevas haciendo la última
semana. El trabajo te supera, lo sé, y también se que me echas en
falta. Tus llamadas a cada pocas horas me dejan claro que no dejas de
pensar en mi y eso me llena de orgullo.
Me
abrazo a la almohada a esperar que vuelvas, el aroma de tu piel y tu
perfume impregnado en ella hace que lo aspire con fuerza imaginando
que estás ahí y suspiro con energía, echándote de menos, pese a
no llevar ni un día fuera.
Las
horas son eternas si no estás tú, sin tu mano amiga que me eleve
cuando empiezo a descender.
Siento
paz con tu aroma entrando en mi nariz y creo que sin darme cuenta,
empiezo a dormirme poco a poco...
Y sueño
con tus manos acariciando mi pierna, subiendo lentamente por mi muslo
apartando el camisón despacio, dejando mi blanca piel descubierta
para ti. Y se me escapa un gemido mientras hundo mi cara y la
restriego en la almohada llena de tu olor.
Pero me
doy la vuelta y veo que no estoy soñando, que estás ahí, conmigo
"hoy he venido antes, no podía estar mas sin ti" me
dices mientras, tontamente, empiezo a llorar.
Siento
como su peso hunde la cama, como sus labios comienzan a recorrer mi
cara y lame cada lágrima que he derramado. "shh, no llores
tonta" Y sonrío como una idiota estirándote de la corbata
para evitar que te escapes más por hoy.
Te
deshago el nudo y terminas de quitártela, mientras con la otra mano
me destapas completamente y dejas mi otra pierna al descubierto. Veo
como te quitas la chaqueta, y te pido que te acerques para
desabrocharte la camisa despacio, mientras te beso.
No dejas
de acariciarme el culo, la espalda, el pelo... mientras estoy
arrodillada en la cama apartándote la camisa y dejando tu pecho al
descubierto, donde mi boca se va directa, a lamerte, besarte,
sintiendo el vello acariciarme la cara en cada mimo que te doy. Pero
realmente el que presta mas atención eres tu, que siento tu mano
acariciar mi pelo, como si fuese una niña pequeña, como me apartas
y me besas con dulzura sin dejar de recorrer mi cuerpo.
Necesito
sentirte de manera plena, completa, sin ropas de por medio. Te voy
quitando el cinturón, desabrochando el pantalón y lo dejo caer. Te
mueves mientras me besas para sacarte los zapatos con los pies, no
quieres perder un sólo segundo lejos de mi boca. "Tus dulces
labios me enamoraron" me dijiste mas de una vez.
Cuando
te tengo completamente desnudo delante de mi, me coges en brazos,
haciendo que te rodee la cintura con las piernas, y te sientas
conmigo pegada en el filo de la cama.
Me besas
el cuello mientras tus manos suben por mi camisón, recorriendo mi
cintura, mi espalda, acariciando mis pezones por debajo del raso.
Me
agarras del culo apretándome mas contra ti, mientras tu boca se come
la mía con desesperación, y siento la necesidad de fundirme
contigo, tenerte dentro, sentir como tu cuerpo y el mío se
complementan el uno al otro. Amada, deseada, querida, ser por y para
ti, tu amante, tu compañera, tu amiga.
Como si
me leyeras la mente me tumbas en la cama y te colocas entre mis
piernas, sólo besándome el cuello, acariciando mis pechos con
delicadeza. Lamiendo mis pezones mientras te paso las yemas de los
dedos por la espalda, marcándote con mis manos.
Recorres
un camino de besos tiernos por mi vientre, llegas a mis ingles con
una delicadeza admirable me lames y me besas, haciéndome suspirar.
Me acaricias mi sexo, preparándome para ti, aunque sabes que no hace
falta, sólo te necesito dentro y con urgencia.
Entras
en mi despacio, provocando una lenta tortura de sensaciones
placenteras. Te rodeo la cintura con las piernas, prohibiéndote que
me dejes ir o que huyas de mi. Entrelazas tus manos con las mías
mientras me besas y nuestros pechos se rozan con el vaivén de
nuestros movimientos, con el dulce baile del amor, entrando y
saliendo. No es sólo sexo, es amor, pasión, dulzura y mucho
sentimiento.
Te
mueves despacio dentro de mi, sintiendo cada embestida como me haces
tuya, como te adueñas de mi cuerpo, de cada parte de el. No puedo
huir de ahí, tampoco quiero, tu peso presiona mi cuerpo y el colchón
se hunde bajo nosotros. Me agarras tan fuerte las manos que casi no
las siento, pero no importa, me encanta sentir como cada parte de tu
conecta con la mía.
Nuestras
bocas se rozan, se besan, nuestro aliento choca entre si con cada
pequeño gemido que dejamos escapar. Y tus ojos me observan
fijamente, donde veo todo lo que sientes por mi y lo que me quieres
trasmitir. "Te quiero" susurro entrecortada en tus
labios. Y sonríes orgulloso "Y yo a ti, pequeña".
Poco a
poco, con este dulce movimiento siento como me elevo a las estrellas,
como tus manos me agarran para no dejarme escapar, y me dejo ir,
dando el poder al orgasmo de apoderarse de mi y tensarme con tu
erección dentro de mi cuerpo, corriéndome para ti mientras tus
besos atrapan hasta el último de mis gemidos.
No se el
tiempo que pasa, por que me quedo completamente aturdida, cansada,
extasiada... pero siento como sigues embistiéndome, conteniendo tus
ganas de darme con mas fuerza, pero se que hoy lo haces por mi, por
que necesito ternura y no buscas tu placer, sino el mío. Tu boca
presiona la mía, tensas tu cuerpo y entonces noto como te dejas ir
dentro de mi, como te corres en mi interior y callas tus propios
gemidos con ese beso, mostrando una debilidad impropia de ti.
Caes
rendido sobre mi, recorriendo mi cuello despacio con pequeños
besitos tiernos que me hacen sonreír. Te das la vuelta y me acurruco
en tu pecho, echándote mi pierna por encima y abrazándote con un
brazo mientras mi cabeza sube y baja por tu, todavía, acelerada
respiración. Estando en el paraíso de tus brazos, puedo dormirme
tranquila, satisfecha y saciada, no sin antes decirte "Te amo
mucho mi amor".
Me alegra mucho que te haya gustado, pero me entristece haber removido momentos malos. Gracias por comentarme siempre, me alegra mucho leerte por aqui ^^
ResponderEliminarUn poco exagerado que se ponga a llorar ella por un día de trabajo del otro, que parecía que le había pasado algo xDDD
ResponderEliminarQuitando eso (y los varios "más" sin tilde que se te han colado xD) ha estado bien. Bastante poético que se nota es lo que buscabas así que bien hecho.
buah te sorprendería las veces que las mujeres lloramos por cualquier cosa, al menos yo XD, como este sensible ese día, me miran y lloro xD.
EliminarLas faltas ortograficas...no termino de controlarlas T__T si alguien me lo hubiese corregido.... ains xD.
Se, mi intención era hacerlo muy poético, como me sentía en ese momento, melosa, romántica y cursi jajajaj.
Gracias por opinar, sabes que me encanta que lo hagas :)